Qué será de mi cuando ya no estés,
cómo será ese mundo sin tu compañía….
Quien me susurrará al oído aquellas palabras
que solo tú con amor me las sabías dar…
A quien esperaré en el crepúsculo de cada día
cuando llegue a mi casa rendida …
A quien le contaré mis tristezas y alegrías,
de seguro me contestará, un tenue silencio …
A quién degustaré de los mejores antojos,
si solo yo sé, qué era lo que te enloquecía…
Quién me contará todo el trajín de su día,
si solo era yo, quien te escuchaba…
Quién con aquellas palabras, alimentará mis días…
si solo tú, me las dabas con sabiduría.
Oh tiempos tan rápidos los nuestros,
como un parpadear de ojos los he visto pasar…
y como un destello de un suspiro,
podrían acabar y aún peor, sin avisar…
Autora:
Marcela Villalobos B
Cuando se ha tenido la dicha de vivir un gran amor, este no fenece, los recuerdos lo mantienen vivo, y un día, casi sin esperarlo, regresa en otro rostro, pues quien ha sido feliz, no renuncia al amor. Hermoso poema, Marcelita, te felicito. Besos
ResponderEliminarEste comentario ha sido eliminado por el autor.
ResponderEliminarHola Myriam, gracias por tu visita y bello comentario, estos son los pensamientos que muchas veces nos hacemos cuando se está disfrutando de un bonito amor y nos acongoja saber que la muerte es aquello que lo separa para siempre ...gracias por tu tiempo, abrazos amiga.
ResponderEliminarPues la vida se vive segundo a segundo, sin pensar en lo que podría ocurrir, porque es tiempo mal gastado. Buen poema, niña, felicitaciones!!! Besos
ResponderEliminarGracias Myriam por visitar mis poemas, un saludo y abrazo hasta tu bella tierra, Marce
ResponderEliminar